Donde la humanidad pierde su sentido

Mientras los estados muevan buena parte de su economía generando ingresos con material armamentístico, resultará imposible erradicar las guerras que se suceden en este planeta. Así mismo, con buena parte de la enfermedad.
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… y con el sufrimiento y con la sangre derramada de inocentes, se llenan, de champagne, las copas que beben algunos
sentados sobre sus tronos opulentes; tronos ganados a fuerza de suma crueldad y ambición.
Hay seres desalmados que, debido a su desidia y nula empatía, se ríen, aun conocedores de su contribución para los desastres, disimulan, señalan hacia otro lado y bostezan; al tiempo que por el mundo infinidad de pequeñas pantallas muestran el horror más absurdo y absoluto cual se puede provocar.
¿Dónde la utilidad del raciocinio?
¿Dónde está la humanidad?…
Estará esparcida, tal vez, por otros planetas y espacios.
Allí, en dónde a la par el sufrimiento es fruto del negocio, se visten las madres de luto y padres con caras de espanto, desangelados y rotos, lloran como niños por sus menores. Allí, dónde la misma muerte se incomprende y desdiría de si misma; dónde la batalla toma el nombre de locura y la lucha pierde todo tipo de sentido al ver el precio que se paga al resultar multiplicadas las tragedias (cuál es peor derrota sino la de contemplar la muerte de nuestros seres más queridos).
¿Quién es capaz de mandar las más horribles misivas y acometer los actos más demoníacos sin sentir vergüenza?
¿Quién?…
¿Quién es capaz de llenar sus arcas y concederse una vida de lujos sin ser humillado, maltratado y hasta engullido por su conciencia?
¿Quién marca de quién es y cuál es el precio de cualquier porción de tierra?…