Sediento

Aborrezco la lejanía de tu espacio.
Soy un nostálgico empedernido, un infante, crédulo y poseído, que aún confía en los sueños: Acógeme dentro de tus bosques y concédeme, de nuevo, la voz de tus aguas. Necesito el respiro que incluso traspasa las mismas entrañas, en pos de encontrar la ansiada profundidad que le regala cuerpo y rostro a las almas.

**

¿Cómo es nuestro amor?… En qué se han convertido veinte años de vivencias compartidas.
No aparecemos como los mismos ¿será debido al óxido inevitable que transmite el reloj? .
Ya dejamos de jugar a las ninfas y los faunos.
Ya nos ajusticia el silencio impedido de paz igual que se desvanece la musical esencia de la primavera.
¿Padecemos invierno?. Todos también vestimos invierno: muerte tras frío, cambio y resurrección.
Hoy siento que somos tristemente vulgares: una caja hermética que se queda sin aire, caja cual solamente aspira a la extinción al disponer de una oscuridad que nunca dará luz.
¿Tuvo mal envejecer nuestro amor?
… Desafiemos a la monotonía cuándo advirtamos que la naturaleza más valiosa se ahoga ante la embestida de los vientos.

Sin tiempo

Seducirte
lejos del antes o del después
que escupa interrogaciones.
Mi sonrisa recorre
como gota de lluvia tu rostro
para quedarse.
Guiño tras guiño
abandono los términos medios;
aparto causas de eclipse
hasta encontrarte.
Sólo vale atraerte
junto a la energía del ser
que danza, como efluvio inmortal,
dentro de la corriente.

Y hasta los grandes mitos desistieron (r)

«(…) Shakespeare revive
porque Julieta y Romeo nunca murieron:
Tchaikovski suena
rememorando amores inevitables
cuales desatendieron a la rendición;
amores que sólo abogan
por estaciones duchas en poesía
para su lucha.»

**

Infortunio:
un corazón apresado
dentro de las fauces del desamor.
Mientras reos… ¡dislocados!
personajes sujetos a un lenguaje hostil
imposible de tergiversar.
El desamor corrompe brillos
cual ácido corrosivo;
su trote, intratable y salvaje,
repleto de taquicardias,
convierte a los humanos en muñecos.

Corazones rotos:
Desorden.
Confusión.
Ruido y más ruido.
Pulso alejado de órbitas
¡Desangrarse de planetas!
Firmamento sediento de ilusiones.
Cielo quebrándose al oír ¡NO!
Desamores dictando
crónicas que se perpetúan
con sabor a martirio;
reclamando epitafios y tumbas abiertas
durante la tormenta.

Mi ahora es de colapso:
hundido en lo re-tan agrio y profundo
soplo las velas de tu aniversario
cuando conozco nuestra defunción.
—¿cómo sabrán las hieles del infierno?—

Inevitablemente
¡Todos cómplices de Cupido!…
y desamores como lección. Sigue leyendo

Magia antigua

Y aunque las brujas perras, las de la antigüedad oscura, con malas artes pretendieran deshacer los encantamientos divinos, ellas solamente quedarían presas de una mayor envidia.

**

Porque tus ojos son universo abierto donde encuentro caminos, me recuerdo la tanta buena suerte que me reservó el destino.Mientras mis pies sobrevuelan los sueños, hallo elixires salvajes y mágicos que purifican mi mente. Entonces, como ser de agua, ser de aire, ser de tierra y ser de fuego, giran las llaves y, cediendo todas las puertas, gozo de la integración completa, desleo mi yo y sucede «Nirvana».

Seres trino en la rama (apuntes de amor XXXIX)

Por coincidir en el do-re-mi-fa-sol…
Arrebatarle a los paisajes venideros
un pedacito de umbría soledad:
Hilar un par de mundos separados
y desperezar complicidad;
pasos conjuntos arrebatadores
que conceden como resultado;
mentes aliadas,
ilusiones eternas
y manos unidas.
¡Cuánto puede la música
cuándo no discrimina las notas
ni divide los sones!.
318-omu G.S (bcn.2017)

Adioses difuntos

«Acicalados con el limpio,
ya retiradas las pugnas y los intereses conocidos
mientras nuestros cuerpos coincidieron.»

Aunque los corazones durarán
por siempre cercanos.
Aun con un dolor punzante
hincado en las arterias.
El aliento: Hora adiós.
Debiera ser viajero decidido a partir.
Hay momentos en que la cuenta suma
LEJOS
LEJOS.
Lejos
¡qué contradicción!
tan cerca como unidos
en una doctrina y el alma
y, a un mismo tiempo,
corresponde estar separados,
rememorando vivencias gratas
y deseos que se nos mostraron como imposibles.
¡Lejos!.
Sin quererlo.
Debido al juicio sensitivo
con criterio.
Apartados del odio cancerígeno
y de la rabia violenta
y de los juegos sucios
que ampara el rencor,
desahuciando miserias humanas
que, faltándole a la nobleza,
citan a la traición.
Lejos (cuando juntos y mediando intermitencias).
Cercanos (los kilómetros son borrados
porqué aquel aroma perdura).
A la distancia le resulta imposible
incendiar y romper
puentes y lianas;
proseguimos aferrados
a una simple voluntad:
Persiguiendo cualquier lección
que susurrase «vida»
al pregonar
-desde la lejanía o próxima-,
la valía universal
que consta en el amar.
Aunque lejos…
sucede que hay adioses
que siendo antónimos de marcha
más nos acercan todavía,
así es como pierden sentido, ante ese amor
que otorga y extiende tiempo frutal,
todas las despedidas.
318-omu G.S (bcn. 2016)

De vuelta (apuntes de amor XXXIV)

de vueltaEscribo para decirte
inventemos rosas faltas de espinas
«no vengan cruces sobre nuestro amor».
Pido jardines
cuando leamos detalles,
el paraíso no necesita
de manos ni lenguas cortadas.
Somos naturaleza culminante
que despereza ideales
y vuelca creación.
Escribo para resaltar
un hallazgo: el origen,
donde dos quedan como pasado
al latir siendo un solo corazón.

318-omu G.S. (bcn. 2016)

Aliento (apuntes de amor XXX)

Hallar nido
donde estés
—no me preguntes por qué—
y racimos de uvas
junto a días festivos
y ramas de olivos
con los que aceitar
aptitudes y actos,
decisiones chirriosas.
Detrás de la impetuosidad
de huracanes, tus pestañas
son y traen albor:
Exclaman palomas
que aclaman y esconden
un mundo mejor.
—No me preguntes por qué—

318-omu G.S. (bcn. 2016)

«ar» de desear hasta venerar (tal vez amor)

caiguda sol tibiDeseé tu pozo:
porque desde él surgía
el agua que quería beber
mi parte masculina:
El alma que, supongo, tengo
en continua locomoción,
presa de una deriva lobezna
o sujeta a la composición regeneradora.
Y el mismo espíritu que traspasa
todas las puertas habidas,
sabidas y desconocidas, o aún por crear
para donarle revolución a mis entrañas.

Amé tus aciertos y tropiezos,
tus disloques e imprecisión
y aquellas pócimas extrañas
que preparabas
y siempre consideré privilegios.

Participé gustosamente de tu carne,
bocado y sorbo y gemido y saliva
¡derretido dentro del gusto!
incluso al deleitarme del carbón
al destaparse tus claroscuros.

Deseo de amar.
Amar — quizás por caprichoso
y complacido y desear —
Pude aprender,
incluso al arrimarme a tu Lucifer,
a disfrutar por entero
de la virgen-diosa-yegua-mujer
que con sagacidad escondes.

Pasado y presente
a la caza del futuro.

318-omu G.S. (bcn. 2015)

-apuntes de amor XXIV-

Tarde de cuento, futuro de libro

Cuántas son las veces
que caminos que son mutuos
y saben a nuestros
muestran su espalda.
Marchan.
Se pierden.
Siendo neonatos;
como fantasmas
tuercen esquinas…

Acera frente a acera.
Calzada es río
mientras los autos pasan corridos;
como cortinas nos separan
del hola y los diálogos,
de la dulce mordedura de los ojos
y del tacto alfombrado
que sería buenaventura y bienvenida.

Acera frente a acera
y aquí, nosotros,
pendiente arriba
o calle abajo:
Vecino sobre vecino.
Camino cruce de caminos.
Dentro de una vivienda reja,
creando y creyendo
en extraños y ladrones;
extraviando gozos
y desestimando buenos días;
café y tostadas
almohada, colchón
y Dios mañanas.

Aún nosostros…
Sobreviviendo como ambas orillas
esperando el juntos como regalo.

¿Puedes mirar y verme?
traspasar la distancia
vergonzosa del cuerpo
y pasear
por las plazas y callejas
que desde siempre
para ti guardo.

318-omu G.S. (bcn. 2015)