Gracias a las cabras sin establo

Marta cabalga salvaje por sus días y, aunque fue repetidamente desvirgada -como suele suceder al pagarle tributo a los años de una vida- nunca perdió la inocencia de su niña, jamás la traicionó ni quiso abandonarla. No renunció a sus sueños ni tras las peores partidas.
Trabaja vital. Ilusiona amistades y futuro. Fantasea hasta el punto de yo creerla visionaria. Pasea alocada e incapaz de domar con acierto dominante sus impulsos. Anda libre y corre libre. Salta con tal ímpetu, que hasta levanta los ánimos que va encontrando caídos.
Hace mucho, la oí contar que tenía un lema añadido al de no dañar a nadie «soy un naipe que se dispone para el juego y un ladrillo constructivo preparado para edificar y una osa renegando de perder el tiempo e hibernar».cabras y caballos

Ella da. Desde que nació ama por amar -es su esencia que lleva impreso el altruismo- Se entrega por entero y avanza, alegre y despreocupada, a pecho descubierto; mientras le llueven adjetivos descorazonados y la crueldad del juicio ajeno y poco empático, que no ceja de emitir sentencias despreciativas, bastardas y envidiosas, que pretenden desbancar a esa inconmensurable grandeza -triunfo y vuelo- poniéndole de mil formas distintas, la zancadilla.

2 pensamientos en “Gracias a las cabras sin establo

  1. «Ella ama por amar». esa es la esencia de esta prosa poética que me ha entusiasmado.
    Gracias!

    Le gusta a 1 persona

¡viva la comunicación!

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s