» Más quisiera tener, para disponer,
pero no es justo negarme el saber,
porque unos legislantes
olvidados de mis necesidades,
desmereciendo mi esfuerzo y labor,
acuerdan y deciden compensarme
con el pago de un ínfimo salario.»
(I)
Por las descargas gratuitas aprendo,
me impregno de un sinfín de creaciones,
convengo en los sucesos cotidianos
y añado a mi mirar
una amplia biblioteca de ficciones.
Mediando numerosas buenas artes;
aderezo mi ser.
Consigo renovarme y también crecer.
Descubro tantos pasados como innovo futuros.
Logro amasar los siglos, obteniendo
el mejor de los panes para alimentarme.
Envuelto con diversas perspectivas
me instruyo en la historia del planeta
y advierto lo que esconden las mentes pensadoras.
Igual como deslío las entrañas humanas
o asocio animales y cosas con personas.
La red es un enorme abanico
que ventea cultura;
apuntes literarios imperdibles
y fantásticas obras musicales
e increíbles haceres cinéfilos.
Gracia políglota y artística
que usando su rostro polifacético,
desglosa pasares exponiendo vivencias.
Suerte tengo de tanto arte dispuesto
en las descargas que asoman gratuitas.
Arte que para mí sería inalcanzable,
al estar maniatado, ¡sometido!,
al presupuesto escaso de un obrero.
» Se justifica el acoso a los tuertos de un ojo
con fama de truhanes y arrabaleros,
mientras se les permite y nunca molesta
a los que miran y hacen desde arriba.»
(II)
Los intereses económicos asolan siendo plomo,
se transforman en balas y disparan.
Cazan liebres que saltan libres,
y aniquilan a todo pájaro que vuele satisfecho
disfrutando de la gratuidad del lienzo,
que este cielo terrestre les exhibe.
Las multinacionales
y su triste réquiem de finanzas
hunden veleros livianos que viajan,
que aliándose con el viento
alcanzaron el anarquismo y el sosiego.
Que a fuerza de tesón, de músculos y remos
llegaron a disfrutar de cada amanecer
sin ceder a la ambición,
o quebrarle a otros, la vida y sus sueños.
(III)
Cuánta menor aconteciera la cultura
empapando la vida de los ciudadanos,
mejor para los amos que,
precisando del servil esfuerzo,
pretendan someter a más lacayos.
A cualquier poderoso le conviene,
que converja en uno, ¡sólo el suyo!,
los muchos prismas que hoy habitan existentes.
Para que así, fácil, le resultara la manipulación
y la esclavitud prendiera como hábito permanente.
Cuándo los individuos
bien nos nutrimos de saber y cultura,
obtenemos planos y útiles herramientas
que construyen proyectos eficientes
al proporcionarnos la objetividad.
Los conocimientos desenmascaran
grandes farsas que andan esparcidas,
que contaminan gentes y lugares
e intoxican, con el analfabetismo,
de muchos, su realidad.
La cultura abre puertas;
ella es llave y aire,
una senda hacia la libertad.
318-omu G.S. (Bcn. 2014)